El lugar es mundialmente conocido. En ocasiones la cascada hiela en invierno, nunca completamente, pero la fuerza del agua no permite la escalada. Pero el canadiense Will Gadd tenía el sueño de intentar abrir una línea en ellas. En verano, examinando la zona, encontró un lugar en el que la fuerza del agua podía permitir el ascenso invernal, si se daban las condiciones adecuadas.
“La escalada tenía dos prioridades: seguridad, y ética. No queríamos emplear ningún bolt, tan solo seguros naturales. Además, no dejaríamos nada en el hielo.”
Tras conseguir el permiso de las autoridades, hace 3 días se encontraron con las condiciones adecuadas para la escalada. En realidad, más o menos...”son miles de toneladas de agua cayendo a tu alrededor. Estábamos tan cerca del agua que en algún momento, alargando el brazo, podía meter el piolet en la catarata...” El impacto del agua es tan fuerte que equivale a unos 4.000 trailers de 4 ejes chocando contra una pared.
Sobre la dificultad, Gadd estima que puede ser un WI6+, pero comprometido y en malas condiciones: “El hielo está formado en capas. Esto significa que hay una capa de hielo, luego una de nieve con un montón de aire, luego otra capa de hielo...muy inestable todo.”
"He viajado por todo el mundo buscando las escaladas más difíciles...pero escalar las Cataratas del Niágara, uno de los iconos de mi país, ha sido una misión que me ha llevado una vida, y que no pensaba posible hasta este momento”, afirma el canandiense.
Fotos y video por cortesía de Red Bull.