El Speed Riding es una vuelta más de tuerca a las actividades de montaña, en este caso al esquí extremo. Ya hemos visto el salto BASE, y otras más. Ésta modalidad es una mezcla de todas ellas, pero tiene mucho que ver con el paracaidismo.
De hecho François Bon es un experto esquiador extremo que vive cerca de Les Arcs, pero su trabajo real es de piloto de pruebas de paracaídas, y fue campeón del mundo de paracaidismo. Y modificando los paracaídas, y llevando esquís en los pies, ha conseguido crear esta nueva modalidad.
La lona de un paracaídas normal es bastante amplia. Esto permite permanecer en el aire, y moverse a través del mismo. Más o menos, por cada metro que desciendes, puedes avanzar 8. La lona que se emplea para el Speed Riding es mucho más pequeña, más o menos de cada metro que se desciende, se puede avanzar 4 en horizontal, es decir, está entre el paracaidismo y la caída libre. Te permite jugar entre el suelo y el aire, mezclando el esquí y el vuelo.
Tras descender el Mont Blanc y la norte del Eiger utilizando este sistema, François decidió que ya era hora de que este deporte adquiriera su mayoría de edad. Y la sur del Aconcagua es una tapia única, cercana a los 3.000 metros de desnivel que se pintaba sola para el intento.
Tras 11 días de aproximación, aclimatación y ascenso, alcanzó la cima del Aconcagua, por la vía normal. Y después…
Después, es mejor que veáis el vídeo, grabado con una cámara en el casco. Porque no sabemos muy bien como explicar esto con palabras. Asombroso.
Este vídeo se proyecta por cortesía de la página web www.acro-base.com, página de François.